Afammernavarra.es 

ASOCIACIÓN DE FAMILIAS Y MUJERES DEL MEDIO RURAL EN NAVARRA

 

Encuentro de Asociaciones de Mujeres Rurales 2021

Un año más, celebramos el Día Internacional de la Mujer Rural, una fecha muy importante en el calendario para AFAMMER, para las más de 6 millones de mujeres y familias que viven en el medio rural y las más de 1.600 millones de mujeres rurales que viven en el planeta. 

Este PREMIO BERDINNA va dedicado a todas las mujeres que viven en el medio rural de NAVARRA. Porque su labor no siempre ha sido reconocida.
Ellas siempre han trabajado y han mantenido vivos nuestros pueblos, y de forma especial a todas y cada una de las socias y amigas de AFAMMER-
NAVARRA que han hecho posible el logro del mismo, vosotras sois el pilar de la
Asociación.

Rosalia Echeverria Echeverría
Presidenta de AFAMMER-NAVARRA –

Peralta, acto Día Internacional de la Mujer Rural, 25 de octubre de 2021

Sinopsis de la ponencia:

Análisis del impacto de la pandemia por covid 19 en mujeres de Navarra, a partir del aprendizaje que aportan sus testimonios y experiencias.

La ponencia se ha centrado, fundamentalmente, en las causas que explican el diferente impacto de la crisis generada por la situación de pandemia en mujeres y hombres, desde un enfoque de género e interseccional.

Además, se ha hecho hincapié en la vivencia de esta situación, sobre todo del periodo de confinamiento más duro, en mujeres que viven en el medio rural y  en mujeres mayores de 65 años, con trayectorias vitales más largas.

Finalmente, se ha abordado la resignificación de la vivienda para hacer frente a las medidas de seguridad y los aprendizajes y retos que aporta esta experiencia inédita e impactante para la vida de todas las personas. 

      Sara Ibarrola

#15OMujerRuralAFAMMER  |  #SinMujeresNoHayFuturoEnNuestrosPueblos 

LAS MUJERES CLAVE EN EL DESARROLLO SOSTENIBLE DE LOS PUEBLOS

El mundo rural ha sufrido estos últimos años una gran transformación y vive un proceso de decadencia con respecto a las grandes ciudades. Pero no es un mundo homogéneo, es diverso. Hay municipios que mantienen una densidad demográfica importante porque se han desarrollado en ellos sectores como el secundario y el terciario que han sustituido la pérdida de activos en el sector primario ; otras zonas, por el contrario,  ligadas básicamente al sector agrario, han sufrido una fuerte despoblación, envejecimiento y pérdida del sector femenino y juventud.

Asimismo, nuestra vida se caracteriza por la desigualdad y el desequilibrio en muchos ámbitos: desequilibrio mundo urbano y mundo rural; desequilibrio entre géneros: desequilibrio Norte y sur del planeta: desequilibrio entre sectores productivos, segmentos sociales, …

Desde el punto de vista de la sostenibilidad la crisis sanitaria del Covid ha puesto en evidencia muchas realidades: la existencia de una crisis multi-sistémica; la visibilización de lo que es esencial y lo que no para la vida; la precariedad sobre la que se asientan los trabajos que sustentan la vida y la relación que tiene todo ello con el sector femenino y el mundo rural.

El modelo de desarrollo económico que tenemos hoy en día está sacrificando las bases de la reproducción de la vida. Además de basarse en el desequilibrio y la desigualdad es insostenible porque está agotando los recursos de la naturaleza.

Concretamente, y tomando como ejemple el sistema agroalimentario actual, tenemos un sistema globalizado, que ya no responde a las necesidades de alimentación –presentes y futuras- de nuestras comunidades, ni respeta los límites que marca la tierra. Responde a las necesidades del mercado global, está al servicio de financieras y multinacionales, dependiente de las energías fósiles, de fertilizantes y fitosanitarios químicos, muy mecanizado, que exige grandes inversiones, con una mano de obra muy precaria y muy masculinizada. Este sistema agroalimentario ha traído consigo graves impactos a nivel medioambiental, social y territorial. Y la desestructuración de nuestras comunidades, envejecimiento, despoblación y pérdida de  mujeres y jóvenes está muy ligada a dicho modelo de producción alimentaria.

En este contexto, las mujeres rurales que soñamos con un mundo rural diferente, aspiramos a crear un mundo rural vivo, centrado en las verdaderas necesidades de las personas y construido en claves de sostenibilidad y equidad. Tolo ello requiere de una revisión de nuestros valores y una transformación del sistema económico actual y de las estructuras sociales.

Como alternativa al sistema alimentario actual, proponemos la reconstrucción de los sistemas alimentarios locales ligadas a un modelo de producción a pequeña escala que además de respetar y cuidar los recursos naturales (agua, tierra, aire) garantice unas condiciones de vida dignas para las personas trabajadoras y que ponga en valor la función de las mujeres en el mismo.  Esto sólo es posible desde la AGROECOLOGIA.

Y toda esta transformación sólo se puede hacer en clave de proceso, para lo cual además del cambio cultural de la sociedad es necesario que existan políticas públicas comprometidas con este fin, que faciliten y promuevan el cambio con medidas eficaces.

Por último, si queremos un mundo rural vivo, sostenible y que atraiga a las mujeres, además de transformar toda la cadena agroalimentaria de un modo integral, es necesario revisar las estructuras sociales que la sostienen (fórmulas de organización del trabajo más colectivas, unas condiciones laborales de las personas trabajadoras dignas y un reparto de las tareas entre hombres y mujeres más equitativo). En referencia a esto último, es necesario des-feminizar los cuidados y des-masculinizar lo agrario.

 

GOTZONE SESTORAIN ZABALETA

Peralta, 25 de septiembre del 2021 

MANIFIESTO POR EL DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER RURAL
15 de Octubre de 2021 

Tenemos ante nosotros el gran reto de garantizar la supervivencia de nuestros pueblos, y asegurar que sus habitantes vivan en condiciones dignas. Y al mismo tiempo, el desafío de conseguir la preservación y conservación de los espacios naturales y de la actividad que en ellos se producen. Pues de ello depende nuestra seguridad alimentaria. Por ello, en este día Internacional de la Mujer Rural queremos reivindicar la necesidad de crear una sociedad más igualitaria donde las mujeres puedan equilibrar su vida personal y laboral, y de este modo puedan promover sus iniciativas empresariales o encontrar una salida laboral sin tener que abandonar el municipio que las ha visto crecer. Y al mismo tiempo seguir denunciando las desigualdades y las dificultades que afectan principalmente a las mujeres rurales, pero también a sus familias

LOS RETOS DE LA MUJER RURAL EN LA ERA POST-COVID

Un año más, celebramos el Día Internacional de la Mujer Rural, una fecha muy importante en el calendario para AFAMMER, para las más de 6 millones de mujeres y familias que viven en el medio rural y las más de 1.600 millones de mujeres rurales que viven en el planeta. En esta ocasión, queremos aprovechar la oportunidad que nos ofrece la institucionalización de este día para lanzar un mensaje muy claro a toda la sociedad: la recuperación económica y el desarrollo sostenible tras la pandemia no será posible si no otorgamos a las mujeres del medio rural la importancia que merecen. Este año, en el que volvemos a encontrarnos y reunirnos, tenemos que seguir alzando la voz y crear conciencia social pues tenemos ante nosotros el reto de reconstruir nuestro medio rural. Sin embargo, no queremos olvidarnos de las que sin duda han sido las grandes heroínas de la pandemia: las mujeres rurales. Mujeres que no han dejado de estar ni un solo momento al lado de los más vulnerables. Su solidaridad ha traspasado fronteras y ha sido reconocida por los más altos organismos internacionales como el Premio a la Solidaridad Civil que el Comité Económico Social y Europeo otorgó a AFAMMER el pasado mes de febrero a proyectos que han contribuido de manera excepcional en la lucha contra la COVID-19 y sus desastrosas consecuencias. Un reconocimiento a las más de 190.570 mujeres de AFAMMER pero también para todas las mujeres rurales de España y de toda la comunidad internacional. Tenemos ante nosotros el gran reto de garantizar la supervivencia de nuestros pueblos, y asegurar que sus habitantes vivan en condiciones dignas. Y al mismo tiempo, el desafío de conseguir la preservación y conservación de los espacios naturales y de la actividad que en ellos se producen. Pues de ello depende nuestra seguridad alimentaria. Por ello, en este día Internacional de la Mujer Rural queremos reivindicar la necesidad de crear una sociedad más igualitaria donde las mujeres puedan equilibrar su vida personal y laboral, y de este modo puedan promover sus iniciativas empresariales o encontrar una salida laboral sin tener que abandonar el municipio que las ha visto crecer. Y al mismo tiempo seguir denunciando las desigualdades y las dificultades que afectan principalmente a las mujeres rurales, pero también a sus familias. En el Día Internacional del Día Internacional de la Mujer Rural pedimos:

MÁS Y MEJORES SERVICIOS PARA EL MEDIO RURAL.

Los habitantes del medio rural español recorren 12,4 kilómetros de media hasta el servicio local más cercano como puede ser una biblioteca, un supermercado o una escuela infantil. No es posible asegurar la calidad de vida de las mujeres rurales y de sus familias sino cuentan con las infraestructuras adecuadas y con servicios y equipamientos básicos.

ACABAR CON LAS ZONAS DE SOMBRA

En la que se encuentran el 60% de los municipios rurales porque no tienen conexión por banda ancha o esta es muy defectuosa o cara. Esta situación impide que las emprendedoras rurales puedan dar a conocer sus productos o servicios en igualdad de condiciones que las que habitan en zonas urbanas.

CONCILIACIÓN Y CORRESPONSABILIDAD

Para impedir que las mujeres se marchen del medio rural, lo que se traduce en mayor masculinización y envejecimiento para nuestros pueblos. El 56,8% de las mujeres que viven en el medio rural son las únicas responsables del trabajo doméstico y familiar, donde el 98% de los hombres no interviene.

IGUALDAD EN EL CAMPO

Cada vez menos jóvenes se dedican a trabajos relacionados con la agricultura y la ganadería, mientras aumenta el número de mayores de 65 años que se dedican a este sector. Para corregir el grave problema del relevo generacional en el campo es necesario dar un mayor impulso a figuras como La Ley de Titularidad compartida que nació para otorgar profesionalización agraria a la actividad llevada a cabo por las mujeres rurales durante generaciones y que la próxima PAC sea más igualitaria y atienda a las necesidades de las mujeres en el medio rural. De las más de 945.000 explotaciones que hay en España tan solo figuran como titulares o jefas de explotación 285.467 y desde el año 2011 tan solo se han producido 871 altas en el registro de Titularidad Compartida.

ACABAR CON LAS ALTAS TASAS DE DESEMPLEO FEMENINO EN EL MEDIO RURAL

Las mujeres jóvenes que viven en las zonas rurales sufren más el desempleo que las que viven en las ciudades. La tasa de paro femenino en las menores de 25 años del medio rural roza el 50% frente al 41% de las que viven en las ciudades. Se ven obligadas a abandonar sus pueblos en busca de las oportunidades que su entorno les niega.

APOYAR A LAS EMPRENDEDORAS RURALES

Ellas son las que crean más de la mitad del empleo autónomo en el medio rural. Además, 8 de cada 10 apuestan por emprender en servicios o productos carentes en su entorno.

ROMPER EL TECHO DE CRISTAL

Para que las mujeres tengan más poder en la toma de decisiones del medio rural a nivel social, económico y político.

ACABAR CON LA VIOLENCIA MACHISTA EN LAS ZONAS RURALES.

Según los datos de la última Macroencuesta de Violencia Contra la Mujer, el porcentaje de mujeres que verbalizan el maltrato que reciben por parte de sus parejas o exparejas disminuye en función del tamaño del municipio en el que viven: el 83,3% en las mujeres que viven en municipios de más de 100.000 habitantes; un 78,5% en municipios de entre 10.000 y 2.001 habitantes, mientras que en los municipios de menos de 2.000 solo han denunciado el 66,9% de las víctimas